Siempre quise una encimera negra granito en mi cocina, no solo por su apariencia elegante, sino porque había leído que estas eran muy resistentes. Finalmente, el año pasado me decidí a remodelar la cocina y elegí una encimera de granito negro. Según los expertos, el granito es una de las piedras naturales más duras, solo superada por el diamante, lo que obviamente me dio mucha confianza en mi elección.
Pasaron los primeros meses y la encimera se veía perfecta. Ni un rasguño, ni una mancha. La usaba todos los días y, de hecho, hacía todo tipo de trabajos culinarios sobre ella. Sin embargo, por muy duradera que parezca la superficie, aprendí algo valioso: nunca usar productos de limpieza abrasivos.
Una tarde, mientras limpiaba después de una gran cena, decidí usar un limpiador genérico del supermercado. Este limpiador contenía altos niveles de ácido, algo que normalmente no me preocuparía, dado que había escuchado que el granito es resistente a casi todo. Al día siguiente, noté que la superficie ya no tenía el mismo brillo que antes. Busqué en internet y me encontré con un informe que decía que cerca del 90% de los productos de limpieza comerciales no están diseñados para ser seguros sobre superficies de granito, especialmente aquellas que contienen ácidos o abrasivos.
El daño era visible pero no catastrófico, así que llamé a un profesional en el mantenimiento de encimeras de granito. Me explicó que, aunque el granito es extremadamente resistente, no es invulnerable. Los ácidos, como los que se encuentran en el vinagre o en algunos limpiadores de baño, y los abrasivos pueden desgastar el sellador de la encimera y, eventualmente, dañar la piedra debajo. Me sugirió siempre usar productos específicos para granito, que sean pH neutro y no contengan partículas abrasivas.
Para probar su punto, realicé un pequeño experimento. Tomé dos muestras de granito en bruto que tenía de un proyecto anterior y las expuse a diferentes productos de limpieza durante un par de días. Una de las muestras fue limpiada con un producto de limpieza abrasivo común, mientras que la otra solo recibió un tratamiento con agua y jabón suave. Al cabo de una semana, la diferencia era notable: la muestra tratada con el limpiador abrasivo había perdido gran parte de su brillo y comenzó a mostrar pequeños arañazos. Por el contrario, la muestra tratada con agua y jabón seguía impecable.
Ahora, limpio mi encimera negra granito religiosamente con productos recomendados. El coste de estos productos específicos puede ser un poco más alto, alrededor de €10-€15 por botella, pero la diferencia en la apariencia de mi encimera lo justifica completamente. Además, estos productos no solo preservan el brillo, sino que también promueven la longevidad de la superficie, lo que a largo plazo ahorra dinero en restauraciones o reemplazo.
En el mundo de las encimeras, hay una gran cantidad de opciones, pero no todas son iguales en cuanto a mantenimiento. Mi experiencia ha mostrado que el granito, aunque resistente, requiere un cuidado adecuado. En una de mis visitas a Home Depot, me encontré con una vendedora que compartió una historia sobre una cliente que, ignorando las recomendaciones, usaba lejía regularmente para limpiar su encimera de granito. En poco menos de un año, la piedra había perdido tanto su brillo como su estructura superficial, resultando en un reemplazo completo que superó los €2000 en costos.
Conclusión: sí, el granito negro es una fabulosa elección para una encimera, pero como todo, requiere un cuidado adecuado. Ya sea que estés considerando una nueva encimera o ya poseas una, asegúrate de usar los productos de limpieza correctos. La prevención es siempre más barata y menos estresante que la reparación.